Después de que el PSOE se haya comprometido en su reciente conferencia política a reforzar su código ético, incluyendo la obligación de dimitir para todos los cargos públicos que estén procesados, el secretario regional del PSOE, Guillermo Fernández Vara, estuvo ayer en la ciudad y, ante el inminente juicio contra la exalcaldesa Elia Blanco y otros ediles y exediles, dijo que sigue confiando en la presunción de inocencia "de todo el mundo".

"Yo voy a seguir confiando en la presunción de inocencia, mucho más siendo de gente a la que me unen afectos personales", aseveró el líder de los socialistas extremeños antes de subrayar que lo único que desea en relación a este caso es que "se haga justicia".

A preguntas de los periodistas, Fernández Vara insistió en que "cree mucho" en la Justicia. "Siempre he creído profundamente en la Justicia, trabajé muchos años para ella y volveré cuando deje la política".

Se da la circunstancia de que dos imputados, Elia Blanco y Francisco Barbancho, son ediles del grupo municipal del PSOE, aunque no militantes porque no solicitaron la reincorporación al partido. Tampoco los imputados Enrique Tornero y Pablo Sánchez Del Mazo y sí Blas Raimundo, pero no fue aceptado.