Un ferri con más de 800 pasajeros a bordo naufragó la madrugada del sábado en el archipiélago tanzano de Zanzíbar, en el Oceáno Indico. El hundimiento de la nave causó la muerte de al menos 192 personas, según las autoridades. Los equipos de rescate lograron rescatar con vida a 606 pasajeros. Se trata de uno de los naufragios más mortíferos ocurridos en Africa a lo largo de los últimos 10 años.

El transbordador salió de la isla de Unguja --conocida también con el nombre de Zanzíbar-- para dirigirse a la de Pemba, situada a unos 50 kilómetros de distancia. Cuatro horas más tarde, sobre las 2:30 de la madrugada (hora local) se produjo la tragedia frente a la localidad Nungwi, en la punta norte de la isla de Unguja.

La nave se hundió en cuestión de minutos. "La tripulación nos decía que todo iba bien cuando les pedimos chalecos salvavidas. Cuando las cosas empeoraron ya era demasiado tarde", explicó a la agencia France Presse uno de los supervivientes.

Todavía no están claras las causas del accidente, pero todo parece indicar que la nave transportaba a mucha más gente de la autorizada. "Al principio pensábamos que viajaban 610 personas, porque eso era lo que ponía en la lista de pasajeros, pero ahora sabemos que eran muchos más", aseguró a Efe el director de Comunicación del Gobierno de Zanzíbar, Yussuf Chunda. El ferri, de nombre My Spice Islanders, tenía licencia para transportar a un máximo 600 pasajeros. Además, llevaba en sus bodegas una carga de arroz y de otras mercancías.

Las personas que suelen utilizar estos transbordadores para desplazarse de una isla a otra denunciaron que los barcos se encuentran en mal estado y que siempre suelen ir con exceso de carga. "Normalmente viajamos como sardinas en lata" dijo uno de los usuarios.

DE VACACIONES La mayoría de los pasajeros que viajaban en el ferri eran de la isla de Perma, donde volvían tras pasar fuera de casa unos días de vacaciones. En las labores de rescate, además de las fuerzas navales y la policía del país, participan pescadores de la zona, con sus pequeños botes. "Debido a los fuertes vientos del oceáno, algunos de los cuerpos pueden haber sido arrastrados hasta las costas de Tanzania", informó una fuente policial.

Alí Mohamed Shin, presidente de Zanzíbar, archipiélago tanzano gestionado por un Gobierno semiautónomo. calificó el accidente de "tragedia nacional" y decretó tres días de luto.