La sentencia de la Audiencia de Navarra que por primera vez da la razón a un cliente que dio por liquidada una hipoteca con el BBVA al no poder pagar las cuotas y quedarse el banco su piso en una subasta fue respondida ayer con una dura advertencia por la Asociación Española de la Banca y la Asociación Hipotecaria Española: si se legalizase este mecanismo de liquidación hipotecaria para familias en apuros, las entidades pasarían a reducir y restringir las condiciones para conceder préstamos hipotecarios. Una portavoz de la Asociación Española de la Banca avisó de que implantar la dación en pago supondría "debilitar el conjunto del mercado hipotecario con efectos en el volumen del crédito, lo cual dificultaría el acceso al crédito, que sería más escaso y caro".

Para el presidente de la Asociación Hipotecaria Española, Santos González, si se generaliza la fórmula de cancelar la hipoteca cediendo el inmueble al banco, "el volumen del crédito se reduciría y se restringiría, porque en términos de mercado no sería gratis ni inocuo implantar esta medida".