La Policía Nacional ha desarticulado una organización dedicada a explotar sexualmente a jóvenes extranjeras en cuatro pisos de Madrid, prostíbulos que eran controlados a través de cámaras conectadas a internet, y ha detenido a 11 de sus integrantes, entre ellos, a los dos máximos responsables de la red.

La organización disponía de un centro de operaciones desde donde se controlaban las cámaras en el barrio madrileño de Arganzuela, según informó ayer la policía, que ha identificado a 17 personas que se encontraban en situación irregular en España.

A los arrestados se les imputa delitos relativos a la prostitución, contra la salud pública, trata de seres humanos y asociación ilícita. Entre los detenidos también se encuentran dos recaudadores, tres telefonistas y cuatro encargadas de los prostíbulos.

La investigación comenzó a raíz de la denuncia interpuesta en un juzgado de guardia por una extrabajadora de la red, quien relató que varias personas obligaban a mujeres jóvenes a ejercer la prostitución. La Policía logró identificar a los cabecillas --Jeverson E.S. y Tatiane A.F--, que vivían en el piso que servía de base para dirigir la banda.