La imagen que la mayoría de la población tiene del donante de órganos como un joven, motorista y sin casco "ya ha pasado a la historia", afirma Rafael Matesanz, director de la Organización Nacional de Trasplantes. Y los datos le dan la razón: en lo que va de año, solo el 9% de los donantes de órganos en España fallecieron víctimas de accidentes de tráfico, cinco puntos menos que en el 2006, una caída que se produce en paralelo al "descenso en picado" de la siniestralidad vial. Matesanz, que dio a conocer estas cifras en el 10º encuentro entre profesionales de la Administración de Justicia y de la comunidad trasplantadora en Santander, recordó que en 1992 los donantes por accidentes de tráfico representaban el 42% del total, 33 puntos más que en este 2007. El año pasado hubo en España 102 trasplantes de riñón entre individuos vivos.
