El Consejo de Ministros aprobó ayer el real decreto que devolverá a los enfermeros/as la posibilidad de recetar determinados medicamentos, entre ellos las vacunas. Este colectivo de sanitarios lleva años luchando por recuperar la facultad que perdió en el 2015, de la mano del Gobierno del PP, y que ha provocado demoras y colapsos en centros de salud y hospitales, motivados por la duplicidad de tareas entre los médicos y estos profesionales. El Gobierno se comprometió a aprobar la normativa antes del comienzo de la campaña de vacunación de la gripe, que es cuando se acentúan los problemas, y ha llegado por los pelos porque en algunas autonomías ya ha empezado y en otras, como Cataluña o Madrid, comienza el 22 de octubre. La portavoz del Ejecutivo, Isabel Celáa, argumentó que el real decreto viene motivado por la necesidad de «aportar seguridad jurídica» al manejo de medicamentos que las enfermeras usan «habitualmente». Con la nueva normativa, se les autoriza a prescribir fármacos que se desarrollen «en un marcado carácter colaborativo» y tras su inclusión en protocolos y guías de práctica clínica y asistencial. Además de las vacunas, las enfermeras podrán suministrar medicamentos a pacientes crónicos, como la insulina, o la oxitocina en los partos, sin esperar al permiso médico.

El real decreto ha sido consensuado con el colectivo y cuenta con el apoyo de la Organización Médica Colegial. En un principio los médicos acogieron con agrado el cambio introducido por el PP para atribuirles en exclusiva la prescripción, pero poco a poco, al comprobar que se producían ciertas duplicidades y retrasos, han cambiado de opinión. De hecho, hace justo un año, el Foro Profesional, integrado por el Ministerio, que todavía capitaneaba el PP, una representación de las autonomías y las profesiones enfermera y médica alcanzaron un acuerdo volver a la situación inicial, ante la evidencia de que la retirada de algunas competencias a los enfermeros había perjudicado la atención sanitaria. El colectivo de enfermería recibió con satisfacción la noticia. «Lo principal de todo es que la situación jurídica de nuestros profesionales estaba en el aire y ahora ya nos da una seguridad impresionante, por lo que podemos tener la tranquilidad de que todo el trabajo que hemos hecho se ve legalizado», aseveró el presidente del Consejo de Enfermería, tras reunirse con Carcedo.

Cascos señaló muy satisfechoque ayer viernes fue «un gran día» para los más de 300.000 enfermeros de España.