Más de tres millones de universitarios se han beneficiado del programa de becas Erasmus desde su creación en 1987 para realizar una parte de sus estudios en el extranjero, según anunció ayer la comisaria europea de Educación, Androulla Vassiliou, al presentar un balance de una de las iniciativas más emblemáticas de la Unión Europea (UE).

El número de estudiantes que participan en el programa cada año asciende a más de 252.000, según los últimos datos, del curso 2011-2012, lo que supone un incremento del 9% con respecto al curso precedente.

Pese a la crisis, España fue el país de donde partieron más universitarios al extranjero con las Erasmus (39.545) en el 2011-2012, seguido de Alemania (33.363) y Francia (33.269). España fue también el país de acogida preferido, con 39.300 becarios en ese curso. Los otros países más solicitados fueron Francia (28.964), Alemania (27.872) y el Reino Unido (25.760).

El programa dispuso en el 2012 de una financiación de 547,26 millones de euros del presupuesto de la UE, y para el 2013 la cifra prevista es similar: 547,14 millones. Esto permite suponer que no habrá este año un aumento significativo del número de estudiantes como los que se han producido anualmente en los precedentes.

El 80% de los estudiantes acogidos a la beca Erasmus pasaron seis meses de media en una universidad de otro país en el marco de su programa de estudios durante el curso 2011-2012, según los datos de la Comisión Europea. El importe medio de la beca mensual se situó en 252 euros, aunque la cifra osciló entre los 123 euros de los estudiantes españoles y los 641 de los letones. La Pompeu Fabra encabeza por otra parte la clasificación de productividad de las 48 universidades públicas españolas, según el estudio U-Ranking, elaborado por el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas y la Fundación BBVA.