´LA PRUEBA´

DIRECTOR: Roger Donaldson. INTERPRETES: Al Pacino, Colin Farrell, Bridget Moynahan, Eugene Lipinski. SALAS: Cáceres, Badajoz

Mal asunto estrenar una película sobre la CIA con la guerra de Irak en pleno fragor y la licencia para matar en el bolsillo de los agentes que operan en el país árabe. Ahora que tanto se protesta, no parece que el 91% de opositores españoles al conflicto bélico haya dejado de ir en masa a ver cine americano o de comer hamburguesas. Pero el caso es que La prueba no es una película propagandística ni hace loa de la organización de espionaje. Esto la salva y la hace interesante.

La prueba contiene cinismo, mentiras, violencia y poco patriotismo (tampoco antipatriotismo, todo sea dicho): es decir nada que sea ejemplar (olvidemos el final, más propio de la tradición hollywoodiense que de un lavado de imagen de la CIA).

Podría alegarse que el discurso introductorio que Al Pacino, jefe instructor de los aspirantes a ingresar en la organización, lanza a estos es una proclama maniquea y proyanqui (buenos y malos, justicia e injusticia): sin embargo, contiene la suficiente ironía como para que sepamos que es un discurso rutinario, que el propio personaje no cree.

Más allá de esto, no hay que olvidar que es Roger Donaldson quien dirige, de manera que La prueba acaba siendo una película de acción y suspense, de duelo actoral, atractiva para conocer las interioridades de la CIA en sus primeros estadios: el del ingreso en filas, el del aprendizaje. Este carácter, digamos, documental, evita lo ideológico y simplemente muestra: deja que el espectador decida la moralidad de esa ley de poder matar o no.