Juristas reunidos en Barcelona instaron a los políticos a legislar para regular nuevos modelos de familia. Dos de los padres de la Constitución, Miquel Roca y Jordi Solé Tura, se mostraron contundentes al afirmar que la Carta Magna es flexible como para dar cabida a los matrimonios de homosexuales. Ambos coincidieron en que hace falta voluntad real reflejada en un cambio del Código Civil.