Su tío Benito fue el encargado de los caballos y los carruajes en películas y series: Cleopatra , Curro Jiménez , los westerns de Almería... Cesáreo Pavón (Cáceres, 1972) participó de extra en algún film y heredó la afición ecuestre, tanto que una noche, siendo niño, le encontró la policía durmiendo con los equinos de un rodaje en el casco viejo cacereño. Ahora acaba de fundar la Asociación Amigos del Caballo de Cáceres.

--¿Es usted de los que se llevaría un caballo a una isla, antes que, digamos... a Marlene Morreau?

--No lo dudaría un momento.

--¿A Marlene?

--No no, al animal... Yo admiro a las mujeres por otras cualidades, y además adoro a los equinos.

--No se queje, hasta la feria cacereña de mayo estrenará un día del caballo. ¿Crece la afición?

--La gente está loca por ir a caballo al ferial y comienzan a preparar los cascabeles, los carruajes, los trajes... Me han llamado de Arroyo, de Casar, de Montánchez, de Serradilla.... Iremos de corto, con la montura vaquera, hasta me he comprado una de 700 euros para la ocasión. Y es que el caballo vuelve a tener auge después de una etapa de bajón , porque es muy sacrificado y la gente se acaba cansando.

--¿A quién montaría a lomos de su equino y le daría un galope?

--A mi mujer, Vanessa... Ella es lo primero. Además, en noviembre hizo realidad mi gran sueño y me regaló un caballo, mi primer caballo, un equino de pura raza lusitana. Hasta ahora siempre había montado ejemplares de pupilaje, de alquiler. Le he puesto de nombre Sueño , sin dudarlo.

--Este mundo siempre suena a postín. ¿Es o no cierto? ¿Cuánto cuesta por ejemplo mantener un caballo mensualmente?

--Depende. En los pueblos resulta más fácil porque siempre conoces a alguien con una parcela o una cuadra. En la ciudad sólo están los clubes, que cobran unos 180 euros al mes, además de los gastos de herraje y veterinario. Pero hay de todo. Yo por ejemplo valoro más el sacrificio que el dinero, porque con una buena cuenta tienes los mejores caballos, pero también los mejores perros, los mejores canarios... Da igual a lo que te aficiones.

--¿Y qué me dice de las carreras y los saltos? ¿Usted apuesta?

--Voy para ver a los animales, pero no me acaba de gustar el mundo de la competición. Eso sí, una vez aposté y gané 150 euros. Me apañó el día de feria.