Once de la mañana. Decenas de alumnos esperan ansiosos la llegada de sus profesores, Juan Martín Díaz y Carolina Navarro, los dos mejores jugadores de pádel del mundo, que durante doce horas ininterrumpidas compartieron sus conocimientos con todos los que se acercaron a las instalaciones del Pádel Center-Emérita Augusta, el primer club indoor de Extremadura. Entre participantes y público más de 400 personas disfrutaron de una espectacular jornada de convivencias y aprendizaje.

"Ha sido absolutamente genial, porque todo ha salido muy bien, tanto a nivel organizativo como de público", aseguraba uno de los organizadores del evento, que añadía que "en el poco tiempo que tenemos abierto el club ya hemos sido capaces de traer a Mérida a los dos mejores del mundo".

El evento también sirvió para que el número uno del mundo, Juan Martín Díaz, presentara su nueva pala, que pudieron probar los participantes y que terminó en la bolsa de uno de ellos, pues el propio Martín la sorteo como guinda final del clinic .

Lleno total en la grada

Ambos maestros del pádel mundial se mostraron en todo momento muy cercanos y todos los participantes y espectadores tuvieron la oportunidad de llevarse un recuerdo inolvidable de los jugadores, con fotografías, pósters y autógrafos personalizados, además de intercambiar anécdotas en la hora de la comida.

En el partido de exhibición hubo un lleno completo, con espectadores de todas las edades y todos los asistentes pudieron disfrutar con los números uno del pádel mundial y dos de los mejores jugadores extremeños, el emeritense Curro Barrau y la montijana Lourdes Pascual, los cuales estuvieron a la altura de estos grandes jugadores.

El tanteo del partido pasó desapercibido, ya que lo que hizo vibrar al público fueron los espectaculares puntos con los que los cuatro jugadores deleitaron a todos, con golpes debajo de las piernas, de espaldas, mirando al tendido... el espectáculo del pádel en estado puro.

Ambos jugadores se despidieron felices por haber podido compartir unas instalaciones a las que alabaron con decenas de aficionados. Y para que el recuerdo perdure dedicaron sus camisetas al club emeritense.

En definitiva, una muestra más de que el pádel está cada vez más de moda en Extremadura y en este caso concreto en Mérida, donde eventos de este tipos contribuyen a desarrollar un deporte que cada vez más está siendo referencia como actividad deportiva y de ocio.