Más de 100.000 parejas del mismo sexo, según los colectivos gays, esperan como agua de mayo la modificación del Código Civil para casarse con los mismos derechos que los heterosexuales y formar un tipo de familia que hasta ahora les estaba vedado. Con este fin, el Consejo de Ministros dará mañana luz verde al anteproyecto de ley que, según el titular de Justicia, Fernando López, hará posible que las primeras bodas gays se celebren a principios del 2005.

En Extremadura, afectará a 50 parejas de gays y 27 de lesbianas, una cifra que según indican desde la fundación Triángulo, que agrupa al colectivo extremeño, no refleja la realidad, informa Pedro Cabacera.

El anteproyecto, que a finales de octubre entrará en el Congreso, será uno de los más cortos que han pasado por la mesa del Gabinete. Se limita a modificar tres artículos del Código Civil en la parte en la que trata el matrimonio (el 44, 66 y 67) y que hacen referencia expresa al "hombre y la mujer" o al "marido y la mujer". Serán sustituidos por otros términos como "personas" y "cónyuges" para incluir a las parejas del mismo sexo.

MAS DE 100 DERECHOS Pero a pesar de que estas modificaciones "no pueden ser menores", según fuentes de Justicia, tendrá amplias consecuencias jurídicas. Permitirán a los matrimonios de gays y lesbianas beneficiarse de más de un centenar de derechos que hasta ahora eran exclusivos de los 8,9 millones de matrimonios heterosexuales. Entre ellos, el derecho a adoptar niños, "como consecuencia de la normalización de la convivencia", recordó ayer López Aguilar.

El cambio convertirá a España en el tercer país del mundo que acepta los matrimonios entre parejas del mismo sexo, después de que lo hiciera Holanda en el año 2000 y Bélgica en el 2003. "Ya era hora de que seamos pioneros en algo. Siempre vamos los últimos en todo", comentó Miguel Angel Sánchez, presidente de la Fundación Triángulo.

El presidente de esta ONG, que lucha por la igualdad social de gays y lesbianas, considera que el número de bodas podría llegar a 200.000 en los próximos tres años. "Si hubiera una ley de parejas de hecho, muchos optarían por no casarse, pero al no haberla es lógico que se produzca un boom de matrimonios gays", vaticinó Sánchez.

Para los homosexuales la reforma supone un hito histórico para acabar con la homofobia y adquirir igualdad de derechos. "A pesar de la presión de la jerarquía católica, seremos el tercer país del planeta en autorizar el matrimonio gay", valoró Beatriz Gimeno, presidenta de la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales.

En vísperas de su congreso nacional, el PP hizo un acercamiento a los homosexuales. En una alternativa que calificó de "centrada" y "moderada", el partido propuso reconocer a estas uniones los mismos derechos del matrimonio, pero rechazando las bodas y el derecho a adoptar.