Efectivos de la Guardia Civil detuvieron ayer en la localidad oscense de Arén a Esperanza S. P., una mujer de 44 años acusada de haber asesinado durante una pelea a su compañero sentimental, Gustavo Comas, de 54 años. Según informó la subdelegación del Gobierno en Huesca, el hombre tenía antecedentes por haber agredido a su pareja, quien le había denunciado a la Guardia Civil. No obstante, el teniente de alcalde de la localidad, Joaquín Pallarés, calificó al fallecido como un hombre "muy tranquilo" y afirmó que era él la víctima de las agresiones de la mujer, que de quien dijo que tiene "depresiones y un carácter violento".
Los hechos se produjeron a las 23.30 horas del jueves, a raíz de una violenta discusión durante la cena. Según las declaraciones de la presunta homicida, el hombre trató de agredirla con una cafetera. Entonces, ella tomó un cuchillo jamonero y se lo clavó en el pecho, lo que le causó la muerte. Una tercera persona, invitada a la cena, confirmó la versión de la mujer, que pasará hoy a disposición judicial, y explicó que se limitó a observar en silencio la discusión y que no intervino en la disputa que desembocó en la agresión, según fuentes de la investigación.
La Guardia Civil acudió al lugar después de recibir una llamada que informaba de la existencia de un hombre herido con un arma blanca. Cuando llegaron, acompañados por el médico de guardia, encontraron el cuerpo sin vida.
La pareja vivía desde hace nueve años en Arén, una localidad de la Franja a donde se habían trasladado desde Barcelona. Según varios vecinos, ambos tenían problemas con el alcohol.
El suceso ha causado una gran consternación entre los vecinos de esta pequeña población del Pirineo oscense, donde algunos vecinos coincidieron en señalar a Efe que la víctima, Gustavo Comas Alvareda, albañil de profesión, era una persona "tranquila y pacífica".
