En el Reino Unido, el país con más embarazos de adolescentes de Europa Occidental, las madres y padres prematuros raramente son noticia. El caso de Alfie Patten, sin embargo, ha escandalizado a los británicos, porque ha sido padre a los 13 años y, además, tiene la apariencia física de un niño de 8. Su foto, con un rostro infantil y asustado, en la portada ayer del The Sun junto a su hija Maisie Roxanne, ilustraba un drama social imparable, pese a las campañas de educación sexual en escuelas.

El bebé nació el lunes fruto de la relación entre el chico y su novia Chantelle Steadman, que tiene 15 años. Los dos viven en Eastbourne. Alfie solía pasar la mayor parte del tiempo en casa de ella. Un amigo de la familia acusa ahora a los padres de la chica de dejarles dormir en la misma habitación, juntos, durante meses. También asegura que otros chicos dormían con la menor y sugiere que se le hagan al bebé las pruebas de ADN para confirmar quién es el padre. El piso de los Steadman es una modesta vivienda de protección oficial que el matrimonio comparte con sus seis hijos, a los que ahora se suma la recién nacida.

"¿QUE ES FINANCIERAMENTE?" Alfie, que vive con su madre, no tiene una idea muy clara de cómo podrá cuidar a su hija. Cuando ayer le preguntaron cómo iba a mantenerla financieramente, preguntó qué significaba eso de "financieramente". "Mi padre me da 10 libras (11 euros) de vez en cuando". Su padre, Dennis, que está separado de la madre de Alfie, ha tenido nueve hijos. Se echó a llorar cuando le contó lo que ocurría y asegura que no es consciente de la situación en la que está. "No tiene ni idea de lo que significa el bebé. Lo que le gusta son los juegos de ordenador, el boxeo y el Manchester United", explica su progenitor. Cuando los adolescentes supieron del embarazo, decidieron seguir adelante con él, pero lo ocultaron durante meses por miedo a la reacción de los adultos. Fue la madre de la chica, que tiene 38 años, quien se dio cuenta al comprobar su repentino aumento de peso.

De momento, sus familias no han perdido ni un minuto para vender la exclusiva, incluidas entrevistas, fotografías y hasta un vídeo de unos menores traumatizados y expuestos sin pudor a los ojos del mundo. Sobre Alfie y Chantelle opinan ahora todos. El movimiento antiabortista LIFE les ha felicitado "por su valentía al traer ese niño al mundo". La oposición conservadora los ha puesto como ejemplo "de la sociedad británica rota". "Cuando he visto esas fotos esta mañana, he pensado en lo preocupante que es que en la Gran Bretaña de hoy los niños tengan niños", declaró el líder los tories. El primer ministro prefirió generalizar sobre la importancia que el Gobierno concede al problema de los embarazos de menores.