El Ministerio de Medio Ambiente había desplegado ayer efectivos, materiales y humanos, para combatir los incendios forestales declarados hasta anoche en ocho comunidades autónomas.
Además de los medios de este Ministerio, la Unidad Militar de Emergencias (UME) colabora en la extinción de los incendios forestales declarados en Horta de Sant Joan (Tarragona), Poyatos (Cuenca) y Aliaga (Teruel).
También a última hora de la tarde, fue controlado el incendio forestal declarado en Serradilla del Llano (Salamanca), municipio perteneciente al parque natural de Las Batuecas, limítrofe con la provincia de Cáceres, a pesar del viento y gracias a la intervención de seis medios aéreos y más de medio centenar de efectivos terrestres.Según han informado a EFE fuentes de los servicios de extinción de incendios de la Junta de Castilla y León, las llamas se iniciaron a unos dos kilómetros del casco urbano de Serradilla del Llano, en un zona de pino y monte bajo conocida como Monte 43.
Las llamas cogieron mucha fuerza en dirección al término municipal de Monsagro, motivo por el que tuvieron que intervenir seis medios aéreos, de los que tres helicópteros pertenecían a las bases salmantinas, uno a la base de Pinofranqueado (Cáceres), otro a la base provincial de Avila y el sexto refuerzo aéreo fue la avioneta de la base de El Maíllo (Salamanca).
De momento no se ha calculado la superficie arrasada y varios agentes medioambientales y de la Guardia Civil se encuentran en la zona quemada para analizar las causas de incendio, cuyas labores de extinción han sido muy complicadas debido al fuerte viento que soplaba.
En Aragón, los efectivos de Medio Ambiente trabajaban en los incendios de Aliaga (Teruel), Alloza (Teruel), Cedrillas (Teruel) y Palomar de Arroyos.
En la Comunidad Valenciana en el fuego que afecta al término de Muro de Alcoy
En Castilla-La Mancha trabajaban en San Lorenzo de Calatrava (Ciudad Real), Poyatos (Cuenca), Uña (Cuenca) y Alcolea del Pinar (Guadalajara).
En la Comunidad de Cataluña los efectivos de Medio Ambiente se concentraron en Calonge de Segarra (Barcelona), Cubells (Lleida), y Horta de Sant Joan.
En el País Vasco, en Arrazua-Ubarrundia (Alava), y en Navarra en Ibargoiti y Juslapeña.
VICTIMAS DE LOS FUEGOS
En cuanto a las víctimas registradas en los incendios de los últimos dos días, a los bomberos muertos y los dos heridos en Horta de Sant Joan (Tarragona) hay que sumar un herido en Poyatos (Cuenca). En concreto es el coordinador de los agentes medioambientales de la provincia que pasó toda la noche ingresado en el hospital conquense con oxígeno y al que el presidente de la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha, José María Barreda, calificó de héroe porque "salvó la vida a un maquinista de Tragsa que quedó atrapado en la máquina y no podía moverse". Este incendio, ha supuesto graves pérdidas ecológica y económica para Cuenca, según el alcalde, porque ha afectado a cinco montes de propiedad municipal.
En cuanto al incendio de Treviño (Burgos), las condiciones meteorológicas y los fuertes vientos registrados en la tarde de ayer, que llegaron a alcanzar los 90 kilómetros por hora, obligaron a retirar los medios aéreos del fuego ante el riesgo de sufrir un accidente.
El incendio que afectaba a la comarca de Treviño y que provocó la alerta para la población de las localidades de Dordoniz, Albaina, Pariza y Sáseta, por lo que sus habitantes comenzaron a abandonar los municipios por propia voluntad a pesar de que, ayer por la tarde, no se vieron obligadas a desalojar.
Las condiciones meteorológicas de ayer, miércoles, fueron "muy desfavorables" desde el punto de vista de los incendios forestales, especialmente en las provincias del este de la Castilla-León, con temperaturas superiores a los 30 grados y vientos fuertes.
También la fuerza del viento impedía anoche a los medios aéreos desplazados hasta Els Ports atajar las llamas del incendio que quema desde el lunes en la zona del valle del río Canaletes, entre La Serra y el macizo de Els Ports, a unos tres kilómetros de Horta de Sant Joan.
El consejero de Interior del gobierno catalán, Joan Saura, explicó a los periodistas que los helicópteros y aviones están intentando que el perímetro del fuego no se extienda antes de que tengan que dejar de volar por la oscuridad.
