El juez decretó ayer prisión incondicional sin fianza para el peón de una brigada de extinción de la Xunta detenido por su presunta implicación en el incendio registrado en Bobadella, tras facilitar los vecinos la matrícula de un coche a la policía. El encarcelado es J. P. D., un venezolano de 38 años, que en el momento de la detención ocultaba en el maletero de su coche una garrafa de gasolina, diluyentes sintéticos y mecheros. Llevaba cuatro años apagando fuegos en verano. Con este son ya una decena los encarcelados, sobre 28 detenidos.
Ayer, fue detenido en Ourense --son ya cinco en esta provincia--, E. F. F., de 35 años, vecino de Vilaza (Monterrei), acusado de provocar un incendio el 26 de julio en A Vagoeira, en el término de Monterrei.
En relación a casos como este, el personal de extinción se manifestó en las capitales de provincia para dignificar su profesión. María José Fuentes, peón de brigada forestal y delegada de CC.OO criticaba que a raíz de detención de miembros de brigadas "se está criminalizando a todo el colectivo".
