Unas 500 personas han sido puestas en cuarentena en Toronto (Canadá) ante la posibilidad de que hayan estado en contacto con el virus de la neumonía asiática. La ciudad ha registrado un rebrote de la epidemia en los últimos días, por la que han fallecido dos personas. La autoridad sanitaria de Ontario informó de que 33 personas son analizadas ante la sospecha de que sufren la infección del síndrome respiratorio agudo grave. De ellas, 25 ya están hospitalizadas y 3 se encuentran muy graves.

Esta nueva alerta se disparó el pasado fin de semana, tras producirse la muerte de dos ancianos que habían ingresado en el hospital con enfermedades ajenas a la neumonía. El Gobierno canadiense teme que el virus se haya esparcido entre los centenares de personas que han visitado los hospitales de Toronto en las últimas semanas, y ha decidido promover su aislamiento masivo.