«Esto no es una competición. Solo encontraremos una vacuna a tiempo si trabajamos juntos». Pese a las distintas iniciativas puestas en marcha por algunos Estados miembros, el mensaje de la comisaria de sanidad, Stella Kyriakides, ha calado entre los Veintisiete que ayer le dieron «un claro mandato político» al Ejecutivo comunitario para que negocie en su nombre la adquisición centralizada de vacunas contra el covid-19 una vez estén disponibles en el mercado. La Comisión Europea, según anunció Kyriakides tras un encuentro de ministros de sanidad de la UE, hará pública su estrategia la próxima semana. El objetivo es conseguir adquirir una vacuna que se «accesible a todos en Europa y en todo el planeta» porque «ninguna región del mundo estará a salvo hasta que todos lo estemos», afirmó la comisaria chipriota.

Para ello, Bruselas aboga por actuar con urgencia e invertir en el aumento de la capacidad de producción para garantizar que todos los Estados miembros tendrán acceso a este tratamiento cuando esté en disponible. «Esto evitará que compitamos entre nosotros y ofrecerá a los productores de vacunas un proceso de negociación simplificado», explicó Kyriakides que insistió en que no ha habido objeciones y que «ningún Estado miembro ha dicho que no vaya a unirse» pese a la alianza anunciada por Holanda, Alemania, Francia e Italia.

Bruselas defiende que un sistema común de compra y distribución de vacunas permitirá a la UE «actuar más rápido, fácil y barato» y garantizará más posibilidades para acceder a una vacuna segura y efectiva a la escala necesaria. La idea es lanzar una licitación abierta a todas las empresas con capacidad de fabricación en Europa que vayan a empezar los ensayos clínicos este año aunque también invitarán a empresas del resto del mundo que se seleccionarán en base a «criterios claros». «Queremos que haya producción en Europa pero para el beneficio de Europa y del resto del mundo», sostuvo Kyriakides.