En los últimos tiempos se han estrenado en nuestro país algunas películas de producción israelí centradas en los conflictos actuales. Amos Gitai lleva realizando filmes desde 1972. Pero Zona libre es el segundo que se exhibe comercialmente entre nosotros. Hace unos años llegó Eden (2002). Y ya está. Gitai también evalúa la realidad de su país, pero sus obras enriquecen la compleja realidad sociocultural a partir de lenguajes arriesgados. En el cine de Gitai (Haifa, Israel, 1950) se mezclan texturas viodeográficas y cinematográficas, formatos domésticos y profesionales, relatos de ficción, documentales y cine-ensayo. Su filmografía se erige en un auténtico fresco de la historia pasada y reciente de Israel vista por alguien que rehuye los fundamentalismos y el lugar común.

En L´arüne du meurtre (1996), por ejemplo, muestra las repercusiones del asesinato del primer ministro Isaac Rabin. En Kippur,souvenirs de guerre (1997), Gitai evoca su experiencia cuando el helicóptero de socorristas israelís en el que viajaba fue abatido en el Golán. Devarim (1995),Yom Yom (1998) y Kadosh (1999) conforman la trilogía de las ciudades y retratan Tel Aviv, Haifa y Jerusalén a partir de sus conflictos.

Kadosh fue editada en DVD junto a Kippur (2000), sobre el conflicto del mismo nombre; Kedman (2002), centrada en el nacimiento del estado de Israel, y Alila (2003), sobre el Israel moderno. Para quienes se sientan inquietos y curiosos tras ver Zona libre , estas cuatro películas son de visión inexcusable.