Edmundo Dantés es un joven y prometedor marinero, apuesto, inocente y jovial. Enamorado de la bella Mercedes Herrera, con la que espera casarse en breve, es el orgullo de algunos y la envidia de otros. Vecinos como Caderousse, compañeros como Danglars o conocidos como Fernando, primo de Mercedes, que no dudan en traicionarlo. Dantés es así detenido el mismo día de su boda y acaba encerrado en el Castillo de If, acusado de ser un espía de Bonaparte. El joven marinero se desespera en su cautiverio, y trata incluso de suicidarse. Pero conoce al abate Faria, otro preso como él, que intenta escapar del penal cavando un túnel. Dantés intimará con el anciano, y este le abrirá los ojos desvelándole la traición de la que el joven ha sido objeto. Ambos proyectaran su fuga, pero el abate, enfermo ya, no llegará a conseguirlo. Antes de morir le contará a su joven amigo el escondite de un magnífico tesoro en la Isla del Conde de Montecristo.

Así comienza la aventura y fuga de Edmundo Dantés, que tras años de presidio, mientras su amada se desposa con su primo Fernando, hallará el magnífico tesoro del que le habló el abate Faria. Convertido en un hombre acaudalado, regresará a Marsella y no cejará, desde el anonimato que le ofrece su nueva identidad, en su empeño de venganza.