TRENES ANTICUADOS EN EXTREMADURA

Extremadura cuenta con los ferrocarriles más desfasados y obsoletos del país. Por la comunidad autónoma circulan a diario trenes cuya antigüedad puede llegar a rondar los cuarenta años y lo hacen sobre unas vías en las que, debido a su estado, ni siquiera las viejas máquinas pueden desarrollar su máximo potencial. Estos datos, que no se dan en ninguna otra comunidad autónoma, vienen a poner de manifiesto el escaso interés que muestra Renfe en acondicionar un servicio ferroviario extremeño que hoy queda muy lejos de lo mínimamente exigible. Cierto es que el número de viajeros que utilizan este medio es de los más bajos de España, pero un servicio con tantas carencias no puede aspirar a mucho más. El transporte ferroviario no será una alternativa real si, a cambio, desde Renfe no se oferta un servicio digno y competitivo, algo que al día de hoy parece improbable.

En este escenario, es difícil entender que tanto la maquinaria ferroviaria extremeña como las vías sigan estando a la espera del tan anunciado convenio que deben suscribir Renfe y la propia Administración autonómica, un acuerdo que nunca llega y que no puede ser excusa para no encarar nuevas inversiones que dignifiquen un transporte tan olvidado.