Cartas al director

LA PUBLICIDAD

Pánico direct

Pedro Serrano // Jubilado

El miedo apela a lo más primario del hombre y, por tanto, puede llegar a anular su capacidad de juicio y llevarle a tomar decisiones irreflexivas. Esto lo saben muy bien los expertos en comunicación y publicidad y algunos no dudan en utilizarlo sin escrúpulos como método para mejorar su cuenta de resultados.

Este parece ser el caso de Securitas Direct, líder en el sector de la seguridad --con más de 900.000 clientes y una facturación anual que ronda los 400 millones de euros solo en España-- y que promueve la cultura del miedo entre sus posibles clientes para aumentar su facturación. Tanto miedo e inseguridad causan con sus anuncios publicitarios y sus agresivas visitas comerciales de venta puerta a puerta que ya casi es preferible la visita de un ladrón a la de un comercial de Securitas Direct.

Recurrir al pánico no solo forma parte de las sesiones de motivación de sus comerciales, sino que éste forma parte de sus campañas de radio y televisión desde hace más de cinco años. Ejemplo: «Esta es la casa de los López, cuando estaban de vacaciones, les robaron todo. Y ésta la de los García, ellos no tuvieron tanta suerte. Cuando robaron estaban dentro [...] Solo con un llamada puedes evitarlo». Esto se decía por ejemplo hace cinco años en una cuña publicitaria que utilizaba como reclamo a Mario Picazo.

Vender, vender sin escrúpulos. Este es el fin. Lo de menos son los medios de este alarmante vendedor de alarmas.

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Lucha contra el cáncer

Luis Urpí // Periodista

John F. Kenndey decía: «Si piensas qué puede hacer el Estado por ti, ¿por qué no te planteas qué puedes hacer tú por el Estado?». He perdido a mi hermana por un cáncer y tengo una amiga que lucha desde hace 12 años para superar uno. Invito a todo el mundo a reflexionar, aunque sean cinco minutos, a la sociedad civil, al mundo cultural, al religioso, a la clase política, al mundo financiero y económico, y especialmente al mundo empresarial del ámbito privado. Tenemos grandes corporaciones y grandes empresarios con prestigio a nivel internacional. Ahora bien, tenemos un problema muy importante de salud que se llama cáncer, y que afecta la práctica totalidad de las familias. El cáncer es una auténtica plaga que nos afecta o nos puede afectar. ¿No creen que entre todos, y sobre todo los que tienen más dinero, podríamos aportar más para que estos profesionales dispongan de más recursos para sacar adelante sus proyectos, que pueden salvar millones de vidas?