Disminuye la cifra de analfabetos y se amplía la grieta entre ricos y pobres

Una de las pocas buenas noticias que afectan a todos los países es la mejora del acceso a la educación. El porcentaje de adultos que saben leer y escribir en el mundo es del 82%, lo que ha reducido en 100 millones de personas el número de analfabetos respecto de 1990. Eso sí, del 28% de mayores de 15 años alfabetizados en Níger a la escolarización universal de Noruega resta aún un abismo. El aumento de las tasas de alumnos matriculados en primaria y secundaria es otro dato positivo del informe de la ONU, en el que no faltan tampoco los números negativos: 115 millones de niños (de ellos 62 millones son niñas) están sin escolarizar. Las mujeres aún representan dos tercios del total de analfabetos.

Del lado contrario, la renta de las 500 personas más ricas del mundo es superior a las de los 416 millones de personas más pobres sumadas. Esta comparativa demuestra que la grieta entre ricos y pobres se sigue ensanchando, no solo entre unos estados y otros sino dentro de cada país.