El dominio del caballo

Los Correa son una familia entregada al mundo del caballo. El bisabuelo paterno, el abuelo y el padre del flamante campeón de Extremadura de doma a la vaquera se han dedicado profesionalmente a ello. Así, no resulta extraño que Rubén Correa Rubiales, joven alburquerqueño de 22 años, lleve montando toda su vida, al igual que su padre, Rubén Correa Coronado, jinete y domador de 50 años natural de Puebla de la Calzada y afincado en Alburquerque donde regenta desde hace 26 años el picadero familiar en el que también trabajan sus tres hijas.

"Aquí en Alburquerque di rienda suelta (nunca mejor dicho) a mi gran ilusión, regentar un picadero propio. Actualmente trabajo con unos 30 caballos en el picadero ubicado en la zona del pueblo a la que debe el nombre", comenta el progenitor del vigente campeón. Con el paso de los años Correa se ha afianzado en el exclusivo universo de la equitación, trascendiendo su fama las fronteras extremeñas, trabajando con caballos de toda España.

Rubén Correa Coronado cuenta en su haber con nueve campeonatos de Extremadura de doma a la vaquera conseguidos de forma consecutiva, hasta que este año entraba en escena el peor rival, su propio hijo, quien le arrebataba el título gracias a la inestimable ayuda de un caballo de 12 años, Jazminito , que "es como uno más de la familia".

En su lugar de trabajo, el trato y conocimiento que demuestra con los equinos recuerda al que tiene Robert Redford en la película El hombre que susurraba a los caballos, por su enorme y simbiótica complicidad. "Me entiendo con los caballos que conozco con una simple mirada, como ellos saben lo que les quiero transmitir al pasarle la mano por encima", señala.

Sin embargo, afirma que su trabajo "es muy sacrificado porque no tenemos días de fiesta y te tiene que gustar mucho". Actualmente cuentan con trece caballos propios. "Cada caballo, como las personas, tiene un carácter por lo que no se deja de aprender con ellos algo nuevo cada día", aclara.

Aunque también doman caballos en la rama de alta escuela, es la doma a la vaquera su especialidad, una disciplina hípica que tiene su origen en los trabajos que se desarrollan en el campo con el manejo del ganado, tales como apartar los toros para una corrida, llevar las reses de un lugar a otros o los tentaderos.

El Festival Medieval de Alburquerque, que se celebra cada año a mediados de agosto, ha reportado fama y un mayor reconocimiento a esta familia.

Para obtener el campeonato de Extremadura de doma a la vaquera se miden cada año con otros jinetes profesionales. Ahora, Rubén Correa hijo es consciente de la dificultad que entrañará competir con los mejores jinetes en el campeonato nacional, pero confía en sus posibilidades y en la de su caballo.