La mayoría de los candidatos al almacén nuclear, sin posibilidades

Se lo pensaron un par de días, se presentaron a ultimísima hora y ahora resulta que un buen número de la decena de municipios que se han postulado para albergar el almacén nuclear apenas reúnen las condiciones necesarias para optar a los seis millones de euros anuales que les tentaron para anunciar su candidatura. Hoy, el Ministerio de Industria publicará la lista de los "10 u 11 candidatos" oficiales, según anunció ayer el ministro, Miguel Sebastián. A partir de ahí, el comité técnico, compuesto por científicos independientes, evaluará las solicitudes y anunciará, probablemente dentro de un mes, los municipios que pasan la primera criba.

Según las condiciones expuestas en la convocatoria pública del 23 de diciembre del 2009 para albergar el almacén temporal centralizado (ATC) de residuos nucleares, varios municipios ya pueden despedirse de sus sueños. En realidad, los candidatos que cumplen mejor todas las exigencias técnicas son Albalá (no está en una zona de riesgo sísmico ni protegida ambientalmente, y está lejos de aeropuertos y plantas químicas) y Ascó (Tarragona), aunque en el terreno político este último es el que cuenta con más oposición por parte de su Gobierno autonómico. En el mismo sentido negativo también se han pronunciado el Parlamento y el Ejecutivo de Castilla-La Mancha, región que cuenta con tres candidatos.

IMPROVISACION Después de que Ascó y Yebra (Guadalajara) se presentaran ya hace semanas con todos los deberes hechos, tras estudiar la resolución 21107 de la Secretaría de Estado de Energía, las otras nueve candidaturas fueron casi todas fruto de la improvisación y de ocurrencias de alcaldes que no querían dejar pasar la oportunidad de reflotar la empobrecida economía local. Un análisis de las bases de la convocatoria evidencia que la mayoría de los municipios no presentan condiciones óptimas en infraestructuras (carreteras y, sobre todo, ferrocarril) o que entran directamente en los "criterios de exclusión" por estar cerca de reservas naturales.

Una, la segoviana Santiuste de San Juan Bautista, ya se retiró a los dos días tras pensárselo mejor. Otra, Torrubio de Soria, ya se da por eliminada por estar todo su término municipal en una zona de especial protección de aves (zepa). El mismo problema tiene Santervás de Campos (Valladolid), donde el 60% del término municipal está en una zepa. De hecho, tanto este pueblo en la frontera con León como el vecino Melgar de Arriba, a seis kilómetros e igualmente candidato, están rodeados de zonas de protección naturales.

La cercanía de parques naturales es el argumento que esgrimen los ecologistas también en su oposición a otras candidaturas. Así, Villar de Cañas (Cuenca) linda con la reserva natural Laguna del Hito, y Zarra (Valencia) está a cinco kilómetros de la reserva nacional Muela de Cortes. En este caso, además, hay poco terreno llano para acoger las 13 hectáreas que Industria pide.

RIESGO APRECIABLE Villar del Pozo queda prácticamente eliminado porque a solo un kilómetro del pueblo está el aeropuerto Don Quijote de Ciudad Real. En la convocatoria se tiene en cuenta, como aspecto negativo, los "emplazamientos con riesgo apreciable debido a posibles accidentes catastróficos inducidos por el hombre (provocados por proximidad a aeropuertos...)".

En el punto en que cojean la mayoría de los candidatos es en las infraestructuras viarias y ferroviarias. Industria explica que, "según el plan general de residuos radioactivos, la posibilidad de contar con accesos ferroviarios hasta la propia instalación es un factor de gran interés", ya que "el transporte por ferrocarril siempre arroja niveles de seguridad superiores al transporte por carretera". Solo Ascó tiene estación propia de tren, mientras que siete de los otros nueve municipios distan entre 30 y 60 kilómetros de una vía férrea. Además, en varios de ellos no hay una carretera principal en un radio de 40 kilómetros.