La reina Sofía se encuentra en Grecia, adonde no viajaba desde febrero del pasado año, para participar en un acto en un santuario marino dedicado a la protección de delfines y otros mamíferos y pasar unos días con su familia con motivo del 81 cumpleaños de su hermano, el rey Constantino, el próximo miércoles.

La última vez que doña Sofía estuvo en su país natal fue a comienzos de febrero de 2020, un mes antes del estallido de la pandemia, cuando asistió a la presentación de los diarios de su madre, la reina Federica, junto a Constantino y su otra hermana, la princesa Irene.

Su estancia en Grecia la ha abierto este lunes con un acto en la isla de Lipsi, en el Mar Egeo, frente a las costas de Turquía, donde tiene su sede el Santuario de Vida Marina del Mar Egeo (AMLS, en sus siglas en inglés), han informado fuentes de su entorno. Este centro se dedica al rescate y rehabilitación de animales marinos que quedan varadas, como delfines, tortugas o focas.

La Fundación Reina Sofía, cuya presidenta es la madre de Felipe VI, firmó un convenio con el Archipelagos Institute of Marine Conservation el pasado mes de marzo, por un importe de 20.000 euros, para ayudar al santuario en su tarea de protección de la fauna marina. Además de rehabilitar a los animales para poder liberarlos, la organización acoge a delfines provenientes de acuarios europeos para exhibición o proyectos de investigación. La protección de los animales y del medioambiente es uno de los asuntos a los que doña Sofía dedica parte de su actividad como reina, en particular, desde la abdicación de Juan Carlos I en junio de 2014.

La madre de Felipe VI, de 82 años, recibió la segunda dosis de la vacuna contra la covid-19 el pasado mes de abril. Días después, fue la princesa Irene, de 79 años, la que se vacunó en el mismo centro público de salud del distrito madrileño de Fuencarral-El Pardo, el más cercano al Palacio de la Zarzuela, donde reside con la reina.

Ambas mantienen una estrecha relación con Constantino, quien reside en la localidad costera de Porto Jeli, en la región del Peloponeso, junto a su esposa, Ana María de Dinamarca. El que fue rey de Grecia entre 1964 y 1967, cuando fue derrocado por la dictadura militar, tiene un estado de salud delicado y se mueve en silla de ruedas debido a los problemas de corazón que padece desde hace unos años.

Doña Sofía no asistió el pasado viernes a la confirmación de la princesa Leonor al estar restringido el número de invitados en la iglesia debido a la pandemia. Por ello, al acto religioso sólo acudieron los reyes Felipe y Letizia y la infanta Sofía.