La bajada de la Virgen abrió ayer los actos del novenario en la Concatedral de Santa María. El templo estará abierto ininterrumpidamente de ocho de la mañana a doce de la noche y los cultos serán predicados por Juan Manuel Díaz Buiza, guardián de la Fraternidad Santa María de los Angeles. La patrona lucirá nueve mantos, tras el de la ciudad que llevó ayer, donado en 1949.