La reducción de kilómetros y la subida de la tarifa son dos de las causas por las que el servicio de autobuses urbanos cerró 2013 con uno de los déficits más bajos de los últimos ejercicios. Las pérdidas se recortaron un 20% respecto al año anterior. La diferencia entre los gastos (6,4 millones) y los ingresos (3,1) obtenidos en 2013 fue de casi 3,3 millones, déficit que en los dos ejercicios anteriores superó los 4 millones.

El ingreso por la venta de billetes fue de 3 millones (la recaudación por publicidad en vehículos fue de 40.000 euros), 300.000 más que en 2012, pese al descenso de los usuarios, 447.000 menos (los viajes contabilizados por uso de billetes, bono-bus y tarjeta mensual), el mayor descenso en los 15 años del contrato de la concesión de la gestión del servicio que acaba el 15 de abril. Los ingresos han subido en 2013 por el incremento de la tarifa, en vigor desde noviembre de 2012.

Los nuevos precios han incidido en un aumento de la utilización de la tarjeta mensual (con la que el coste del viaje es de 50 céntimos) y en que baje el uso de los billetes y el bono-bus. No obstante, éste último es el que más ingresos genera con casi la mitad del total recaudado.

Los costes del servicio en el año 2013 fueron de 6,4 millones, más de medio millón menos que un año antes. El motivo son los ajustes realizados en las líneas con la disminución en el número de kilómetros, que el pasado año fueron 251.500 menos que en 2012. En los dos últimos años se han hecho dos modificaciones para recortar costes en el servicio, ambas han conllevado ajustes en las líneas. Con la primera, que entró en vigor en el verano del 2012, se pretendía lograr un ahorro de 440.000 euros. Con la segunda, que se está aplicando desde marzo de 2013, se buscaba un ahorro de 570.000.

Las previsiones que se manejan para 2014 son que el déficit se siga recortando. En la oferta que hace Subus para el nuevo contrato del servicio de autobuses, las pérdidas para el primer año de la nueva concesión, que se tendría que iniciar el próximo 15 de abril, se estiman en 2,5 millones. Una de las razones de esta previsión a la baja del déficit es que la empresa, que seguirá con la gestión de los autobuses, prácticamente renuncia al beneficio industrial, un coste que en 2013 fue de 418.000 euros.