De la liquidación de los presupuestos de 2015 que se presentó el viernes con datos a 31 de diciembre destaca que un ejercicio más se ha reducido la deuda del ayuntamiento, aunque su importe total, incluida la de los créditos a largo plazo, sigue siendo elevado. Son 40 millones de euros.

En su intervención de ese día, el gobierno se centró en una de las tres magnitudes que forman la deuda. Se refirió a las obligaciones que a 31 de diciembre estaban pendientes de pago y que son gastos recogidos en el presupuesto de 2015 y en anteriores, además de operaciones no presupuestarias. Suman 17,5 millones.

No obstante, el viernes no se detalló su desglose, sí se dio a conocer el informe de la Intervención del ayuntamiento que precisa que las obligaciones pendientes del presupuesto (aquí hay partidas como deuda con consorcios, pagos a concesionarias, subvenciones, proveedores...) se han reducido, mientras que la deuda de las operaciones no presupuestarias aumenta (uno de los motivos es la operación de tesorería de 5 millones que se concertó a final de 2015 y que computa en la cuenta de acreedores no presupuestarios. Con esta operación se atendieron obligaciones pendientes de pago de los presupuestos).

Pero hay más deuda. A los 17,5 millones hay que sumar los 5,3 de operaciones que a 31 de diciembre estaban pendientes de aplicación en los presupuestos. Su desglose no se ha hecho público, aunque dentro de esta deuda en la cuenta de 2014 había pagos pendientes a empresas concesionarias y al consorcio de bomberos, entre otros. La deuda por este concepto fue en años anteriores muy superior, sobrepasaba los 12 millones al incluir la de las expropiaciones, débito que en 2014 se atendió con un préstamo a largo plazo de 8,7 millones y un periodo de carencia de dos años.

La amortización pendiente de los créditos a largo plazo es la tercera magnitud para saber la deuda total. Era a 31 de diciembre de 17,1 millones repartidos en cuatro créditos: el préstamo para inversiones que se contrató en 2008 con el Santander (3,8 millones), el del plan de pago a proveedores de 2013 con el Sabadell (2,8 millones), la operación para pagar expropiaciones que se concertó con La Caixa (8,7) y el crédito sin intereses que Industria concedió hace dos legislaturas y del que todavía se adeudan 1,7 millones.

LA DEUDA total del consistorio a 31 de diciembre tras sumar las tres magnitudes (17,5 + 5,3 + 17,1) era de 40 millones de euros. Se ha ido reduciendo año a año (a finales de 2014 era de 48,5 y al cierre de 2011 era de 81, dado que entonces había una deuda de 44 millones de créditos a largo plazo, parte de la misma, la del plan de saneamiento de 2009, se terminó de amortizar en 2015). Si solo nos referimos a las obligaciones pendientes de pago, también se ha ido reduciendo, pasando de los 36,7 millones al cierre de 2010 a los 17,5 del pasado 31 de diciembre.

La reducción de las obligaciones pendientes de pago ha ayudado a que 2015 se cerrase con un remanente de tesorería para gastos generales positivo, aunque no ha sido la razón principal, el motivo que más ha influido es que se contabilizaron entre los derechos (impuestos, tasas, multas...) pendientes de cobro de ejercicios anteriores a 2015 cantidades que antes no se computaban, lo que también ha obligado a aumentar el importe de la provisión de saldos que son de dudoso cobro.

La principal causa por la que se ha ido rebajando la deuda de obligaciones pendientes ha sido la reducción del gasto público por una menor consignación de créditos vinculada a una menor cobertura de los ingresos, según explica el interventor del ayuntamiento en el informe de la liquidación.

El remanente positivo, que asciende a 2,7 millones, se convierte en un recurso para financiar modificaciones de crédito en los presupuestos, la alcaldesa aludió el viernes a que los resultados positivos de la liquidación podrían destinarse a financiar inversiones como alternativa a la venta de suelo. No obstante, el dato favorable del remanente de tesorería para gastos generales se apoya en derechos de cobros pendientes de ejercicios anteriores al 2015.

Otra fuente de financiación es el recurso a nuevos préstamos. En la liquidación de 2015 se recuerda que el nivel de deuda del ayuntamiento por operaciones de crédito es del 33% de los ingresos corrientes liquidados en 2015, por debajo del 75% en el que ya se necesita la autorización del Ministerio de Hacienda. Hay margen para nuevas operaciones.