Pocos son capaces de retener el nombre y prefieren llamarlo patinete eléctrico. El segway es un aparato de dos ruedas que mantiene el equilibrio de su ocupante gracias a un ordenador, giroscopios, sensores y un motor principal. El usuario sólo deberá agarrar el manillar para conducirlo. Los segways suelen alcanzar unos 8 kilómetros por hora y no ocupan más de 20 o 25 centímetros extra a los lados del ocupante. Quienes los han probado confiesan que se sintieron sobre él "como si tuvieras pies grandes". Tampoco eleva demasiado al piloto, unos 15 o 20 centímetros. Y como además va despacio y es silencioso se usa por zonas peatonales: "Puedes ir entre la gente sin ningún problema, sin asustar a nadie ni atropellarles".

El segway puede estar muy pronto en la ciudad si la Comisión Municipal de Tráfico da luz verde definitiva a la petición que ayer llegó a su mesa de la mano de Etur Cáceres, una empresa que quiere ponerlos en servicio en la parte antigua. Este tipo de patinetes ya están funcionando en Barcelona o Málaga con gran éxito y ahora podría estar muy cerca el comienzo de su periplo por Cáceres. El concejal Santos Parra dijo que la comisión no había dictaminado sobre este asunto y que se estudiará.