El monumento más emblemático del casco antiguo cacereño, la concatedral de Santa María, ha echado un pulso definitivo al mal de la piedra que afecta a buena parte de sus muros y amenaza con reducir la piedra a arcilla. Según ha podido conocer este diario, el Ministerio de Fomento ha concedido al Cabildo de Coria-Cáceres una partida de 952.620 euros para iniciar las reformas interiores --no se ha hecho nada de momento-- y poner fin al grave deterioro que sufren algunas zonas, además de incorporar un sistema de calefacción y rehabilitar el pavimento, lleno de enterramientos y laudes.

Estas obras seguirán a las que se realizan actualmente en Santa María para reformar las cubiertas y la portada norte --muy afectada por el mal de la piedra--, con 279.000 euros del Ministerio de Cultura. Las actuaciones corresponden a la empresa Restaura y el proyecto a los arquitectos Luis González y Justo García. A su vez, esta rehabilitación sucede a una primera fase contra la patología en la torre.

La tercera partida permitirá actuar en los dos próximos años y afrontar dos de las reformas más esperadas: el pavimento, que cubre numerosos enterramientos de obispos y personajes destacados de Cáceres --de ahí la complejidad de las obras--, y la instalación de calefacción mediante un sistema incorporado a los bancos que evitará daños en el solado, según el Cabildo.

FACHADA SUR Además, los responsables pretenden frenar el deterioro de la zona del coro, en muy mal estado, e iniciar las actuaciones en algunas bóvedas. Las únicas reformas interiores realizadas hasta ahora son de mobiliario: retablo, luminarias, megafonía y ciertos ornamentos. La partida, con cargo al Plan de Catedrales (fue aprobada en febrero aunque no ha trascendido hasta el momento), también podría permitir el comienzo de otras mejoras exteriores en la fachada sur, portada sur y ábside.

En estos momentos los especialistas se afanan en la segunda fase, concretamente en la portada norte, por donde accederán los Reyes con motivo de la entrega de las Medallas de Oro en Bellas Artes el 16 de septiembre.

Serán necesarias nuevas inversiones para rematar estas obras iniciadas hace tres años, que devolverán su esplendor al templo cacereño por excelencia, herencia de los siglos XIV, XV y XVI.