Tiene 20 años y es vecino de Los Fratres. La policía lo detuvo el miércoles pasado después de registrar su domicilio. Ayer pasó a disposición judicial acusado de un delito contra la libertad sexual. El joven, natural de Cáceres, se dedicaba a publicar a través de internet imágenes de desnudos de menores, según desvelaron ayer fuentes policiales a este diario.

El éxito policial de la actuación es fruto de las investigaciones llevadas a cabo por el Grupo de Protección al Menor de la Brigada de Delitos Tecnológicos de la Dirección General de la Policía en Madrid.

También colaboraron los agentes de la comisaría provincial. Entre todos lograron la identificación del detenido como una de las personas que había intercambiado, a través de internet, fotografías de contenido pornográfico pedófilo.

Fueron los agentes de Madrid los que acudieron a la casa del detenido a realizar un concienzudo registro domiciliario. Allí se le intervino un ordenador y material informático con contenido de imágenes de pornografía infantil, entre las que se encontraban las que en su día publicó e intercambió a través de la red, y que fueron descubiertas por la policía.

Según informaron fuentes cercanas a la investigación, tras la instrucción de las pertinentes diligencias policiales, el tenido, junto con el material intervenido, fue puesto a disposición de la autoridad judicial competente.

NO SON FRECUENTES

Las mismas fuentes indicaron que las detenciones por este tipo de hechos no son frecuentes en Cáceres. De hecho, la última actuación de este tipo que se realizó en la ciudad se remonta al mes de abril del año 2000 y acabó con la detención de otro joven.

En muchos casos, los detenidos suelen tener un denominador común: si son personas jóvenes no son conscientes de que están cometiendo un delito cuando intercambian información de este tipo. Al parecer, en este caso, el detenido nunca fotografió a menores ni pertenecía a una red decicada a la prostitución, ni tampoco se lucró con esta acción. De momento, se sabe que sólo intercambió algunos fotogramas.

La policía no ha facilitado dato alguno de su identidad, a excepción de su edad, para no perjudicarle. Los círculos informáticos pueden ser muy reducidos en Cáceres y se suele optar por preservar la imagen.