La célebre obra de Lope de Vega contra la tiranía del poder, Fuente Ovejuna, cierra esta noche las funciones del fin de semana del 33 Festival de Teatro Clásico de Alcántara, cuya programación continuará hasta el martes. Pero el de hoy no es un montaje al uso, se trata de una de las singularidades de la presente edición. Su equipo actoral está formado por mujeres de etnia gitana del asentamiento chabolista sevillano de El Vacie, uno de los más marginales de Europa, que plasman con maestría «el descarnado triunfo de las desigualdades sociales», afirma la directora, Pepa Gamboa.

A las 23.00 horas, y tras un intenso día de actividades en Alcántara (agenda anexa), comenzará Fuente Ovejuna. Si estéticamente los referentes de esta versión de la obra de Lope son los mercadillos ambulantes y los campos de concentración, el planteamiento ideológico de Pepa Gamboa pasa por una reflexión sobre las mujeres y el mundo gitano, y sus relaciones y respuestas frente al poder, tal y como se desprende de la obra de Lope, que plasma una llamada a la rebelión del pueblo contra la tiranía.

De hecho, Pepa Gamboa ya trabajó con estas mujeres en la puesta en escena de La casa de Bernarda Alba, de Lorca, a través de la compañía andaluza TNT, que también da vida esta noche a Fuente Ovejuna. Aquella primera experiencia triunfó tanto como denuncia de la vida en aquel barrio y de la situación de las mujeres, como por refrendar el alcance universal de la tragedia lorquiana.