El proyecto Alfombra mágica, diseñado por los arquitectos madrileños Jacob García y José Jaraíz, gana el concurso de construcción del futuro Pabellón de Ferias de Cáceres, según informa la presidenta del jurado y alcaldesa, Carmen Heras, tras la apertura de plicas.

Heras indica que el jurado ha estimado el "gran nivel" de calidad de este trabajo, "que ofrece las mayores y más importantes aportaciones para el cumplimiento y ejecución de los objetivos que marcan los criterios de valoración establecidos en el pliego de condiciones administrativas del concurso".

Según informa la agencia Efe, la alcaldesa muestra también su satisfacción porque el jurado, entre los que se encuentran cinco arquitectos, ha elegido los premios de forma "colegiada y por unanimidad, y porque ha hecho un gran trabajo, ya que ha tenido que seleccionar 15 de los 94 proyectos presentados, de los cuales cuatro fueron desestimados".

El jefe del Servicio de Edificación del Ayuntamiento, Santiago Murillo, describe el proyecto ganador como un edificio con una planta de altura, de 7.700 metros cuadrados, destinado en su mayor parte a espacio expositivo, "que traduce la voluntad de tener más un jardín que un edificio, puesto que la fachada se diluye con un frontal transparente".

En su opinión, se trata "básicamente, de un edificio muy diáfano, con vistas al jardín exterior y una cubierta ondulada que simula un terreno natural donde se podrán realizar muestras al aire libre".

Además, subraya que la parcela ajardinada exterior contiene una zona de carga y descarga y un espacio libre, entre otros aspectos arquitectónicos, "en el que llama la atención una colina construida con los materiales de desecho utilizados en la construcción del pabellón".

La alcaldesa destaca las posibilidades "multifuncionales" que ofrecerá este recinto de ferias, "algo ampliamente demandado por distintos sectores, que será un referente en la arquitectura de la ciudad".

A partir de este concurso se llevará a cabo el proceso administrativo para ponerlo en marcha, un período de tiempo que Carmen Heras estima en menos de tres años.