Una actuación para puristas y para no entendidos que quieran conocer estilos y características del flamenco. Este es el punto de partida del espectáculo que esta noche, a partir de las nueve, se celebrará en el Gran Teatro. Pero hay otro hecho destacable: la reivindicación de la figura y memoria del poeta Emilio González de Hervás, que dedicó parte de su creación literaria al flamenco. Los versos de su obra Er Cante son el argumento de cada cante y baile.
"Si el poema está dedicado a la seguidilla se cantará una seguidilla, si es a las alegrías de Cádiz, unas alegrías" y así hasta catorce actuaciones, según comentó ayer el cantaor cacereño Simón García, el Niño de la Ribera, director de un espectáculo con una amplia partipación de artistas nacidos en Cáceres, como el actor David Bermejo, que recitará los poemas de Emilio González de Hervás y sus palabras precederán a los cantes del Niño de la Ribera, de Carlos Brías, de Tamara Alegre y de Juan José Díaz, para los dos últimos, que son alumnos de la Escuela de Saetas de la Sagrada Cena, será su primera actuación. A la guitarra estarán Juan y Domingo Vargas y al baile Gemma.
Simón García destacó que Emilio González es "uno de los mejores poetas y escritores que ha tenido el flamenco"
