J Sigue diciendo que si no se llega a caer el domingo del Juray que si no se estampa otra vez sobre el asfalto en la insignificante etapa de Pau, mañana estaría luchando por ganar. Herido, como si un mal espíritu lo persiguiera en el Tour, quizás ayer fue la última vez que el aficionado al ciclismo vio a Alberto Contador subir por una cumbre del Tour. El año que viene será el último en la vida deportiva del madrileño y en el entorno de su equipo ya se destapa la posibilidad de que se despida del ciclismo profesional corriendo el Giro y la Vuelta.