Más crecimiento. El producto interior bruto (PIB) español registrará este año un alza del 3,2%, cinco décimas más de lo previsto en abril pasado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) y más del doble (2,6 veces) que la media de la zona euro. El informe sobre perspectivas económicas del organismo, presentado ayer, prevé un ejercicio dinámico a nivel mundial, con un crecimiento del 4,3% este año --por encima de la media del 3,9% desde 1997--, que se repetirá en el 2006.

Pero en el horizonte se cierne una amenaza: los precios del petróleo, que subirán el 16,6% este año, hasta una media del 54,23 dólares; y más del 41,14 el ejercicio próximo, hasta un media de 61,75. La economía ha encajado hasta la fecha el encarecimiento del crudo y los desequilibrios por cuenta corriente, pero los efectos del petróleo se notan.

En cuanto a España, las previsiones del FMI apuntan a un crecimiento menor en el 2006, del 3%. Los pronósticos del organismo dirigido por Rodrigo Rato son superiores a los del Gobierno español, que estima un alza del PIB "en torno al 3%" este año.

El dinamismo español contrasta con la evolución prevista para el conjunto de la zona euro que, con un aumento del 1,2%, ha visto recortadas las estimaciones en cuatro décimas con respecto a lo previsto en abril.

El informe ve "relativamente fuerte" la demanda interna en España y añade que persiste, como en Irlanda, un elevado riesgo de sobrevaloración del mercado inmobiliario. El FMI recomienda al Gobierno español centrarse en la reforma del sistema de protección social, que está amenazado por un envejecimiento poblacional creciente.

El FMI también augura un menor crecimiento en EEUU, por los efectos del huracán Katrina . Con todo, el organismo augura un alza del PIB del 3,5% este año y del 3,3% el que viene en la primera economía mundial.