El llamado contrapacto, el grupo de empresarios que se oponen a la venta de la Banca Nazionale del Lavoro al español Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA), se batieron en retirada y decidieron ayer no presentarse a la junta de accionistas de la entidad italiana, haciendo saltar la reunión al no llegar al quórum necesario del 50%. Una ausencia que no se esperaba, ya que el Banco de Italia impulsó a los empresarios para que se presentasen y diesen a conocer la hipótesis de una contraoferta. El plantón parece que ha sido un movimiento estudiado para ganar tiempo antes de la próxima reunión fijada para el 21 de mayo.
A la reunión habían acudido además del representante del BBVA, Antonio Ortega Parra, otro de los consejeros, Manuel González Cid, ante los rumores de que el contrapacto , que posee el 24% del capital, presentaría su oferta.
Mientras, el grupo accionarial proclive a la oferta española --BBVA (14,7%), Generali (8,7%) y Dorint (casi el 5%)-- respiraba tranquilo ante la posibilidad de que durante este tiempo el Banco de Italia, que se opone a la venta, no tenga otra opción que aprobar la oferta del BBVA.
El presidente de la BNL, Luigi Abete, anunció la falta de quórum para una votación. Y anunció que el 21 de mayo "se presentarán también las cuentas trimestrales, que se aprobarán el 20".
En el terreno de la entrada de grupos extranjeros en la banca italiana, ayer la junta de accionistas de Banca Antonveneta eligió el nuevo consejo de administración en el que figuran los 15 candidatos de la Banca Popolare di Lodi (BPL), que de este modo se ha impuesto a su rival, el grupo holandés ABN Amro.
