Señalar y sacar del armario a los homófobos, lesbófobos, bífobos y tránsfobos. Porque el verdadero problema de la sociedad está en consentir que existan estas aversiones. Fue el mensaje que la consejera de Cultura e Igualdad, Leire Iglesias, mandó ayer desde la Asamblea de Extremadura.

Hace solo 28 años que la Organización Mundial de la Salud despatologizó la homosexualidad. Fue un 17 de mayo de 1990, por eso ayer se celebró una vez más el Día Internacional contra la Homofobia, la Lesbofobia, la Bifobia y la Transfobia.

En su intervención en el acto institucional de la Asamblea, Iglesias pidió que se avance en el protocolo de atención a las víctimas, educar desde la diversidad y luchar contra la discriminación en los centros escolares.

«Actos como este sirven para dar visibilidad y empoderar a las asociaciones LGTBI para construir una Extremadura libre de agresiones», destacó, por su parte, la presidenta de la Asamblea, Blanca Martín. También valoró que la cámara legislativa fue galardonada por la Conferencia de Asambleas Legislativas Regionales Europeas con el II Premio Estrellas de Europa por su celebración de un pleno escolar contra el bullying LGTBI-Fóbico.

«Mucho por hacer»

En el turno de las asociaciones habló el presidente de la Fundación Triángulo, José María Núñez, quien invitó a «mirar al futuro porque aún queda mucho por hacer». Reivindicó que las pruebas de detección de VIH se extiendan a otros lugares más allá de Badajoz y Cáceres, además de intensificar un «acceso verdadero» al protocolo para las personas trasnsexuales.

Núñez ofreció el turno de palabra a Silvia Tostado, también de Triángulo, quien reclamó la visibilidad de las mujeres lesbianas como «herramienta política contra las discriminaciones que se acumulan por el hecho de ser mujer».

En nombre de las familias, consideró que el bienestar de sus hijos «no puede depender de la empatía del profesor o médico asignado».

Por parte de Extremadura Entiende, Sisi Cáceres apeló a la responsabilidad política para desarrollar la ley extremeña LGTBI. Invitó a los diputados autonómicos a que trasladen a sus compañeros en el Congreso la necesidad de propiciar que dos mujeres lesbianas puedan filiar a su hijo sin necesidad de estar casadas. Y abogó por un protocolo de atención para agresiones LGTBfóbicas, además de formación específica de docentes y sanitarios, así como iniciar campañas sobre enfermedades de transmisión sexual entre mujeres.

Finalmente, la presidenta de la Asociación Chrysallis Extremadura, Maribel Díaz, reclamó una ley específica de identidad y expresión de género en la región y pidió que no haya hijos de primera y de segunda: «A la infancia y juventud trans no se la espera».

Respecto al bullying, consideró que es «el primer empujón que puede precipitar a la muerte». «Mirar a otro lado puede ser participar en asesinatos disfrazados de suicidios».

Al acto en la Asamblea también asistieron representantes del colectivo LGTBI, diputados autonómicos de todos los grupos, la portavoz del Ejecutivo regional, Isabel Gil Rosiña; el presidente de la Fempex, Francisco Buenavista; diputados provinciales y las líderes en la región de CCOO y UGT, Encarna Chacón y Patrocinio Sánchez, entre otros.