Una gran nube de humo negro recorrió en la tarde noche de ayer buena parte de la ciudad. Procedía de la fábrica de grasas, y se originó por una avería en una de las turbinas al mezclarse el fuel con el asfalto, según el delegado de la Policía Local, José Fernández, que aclaró que no fue por la quema de despojos, algo que se realiza a partir de la medianoche. El humo provocó las quejas de vecinos de distintas zonas. La nube fue tal que hasta el alcalde de Mérida, Angel Calle, y el propio Fernández se desplazaron hasta la fábrica para informarse.

Por otro lado, una mujer de avanzada edad denunció ayer el robo de 700 euros en metálicos y diversas joyas mediante el timo de la estampita. Sucedió al mediodía, en la calle Camino de la Magdalena. Según la denunciante, los timadores huyeron en un coche rojo, y al cierre de esta edición no habían sido localizados por la policía.