Muchos emeritenses no han tenido conciencia de lo que supone la historia de su ciudad. La historia de Mérida no se limita a la historia romana, visigoda, árabe y su transcurrir en siglos venideros. Se pueden estudiar temas sociales, políticos, económicos... Hay pequeñas y grandes cosas, que se pierden por la desidia y el mal uso que se les da, y esas documentaciones aparecen en los contenedores.

Hace unos años en la calle Camilo José Cela, una persona depositaba en uno de los contenedores un gran bolsa. Alguien se dio cuenta de que aquella bolsa no era de basura. Menos mal. Cuando marchó, otra la recogió y contenía todo un tesoro de información, fotografías y otros documentos de la ciudad, relacionado con los festivales de Mérida. Los tengo en mi archivo.

En la plaza de Santa Clara, otra persona tiró al contenedor toda la información en libros y documentos del antiguo hospital San Juan de Dios. Hoy están en el Archivo Histórico de Mérida. Otra persona se dio cuenta y los recuperó. Quien los tiró era una persona conocida y muy vinculada al hospital. ¿Dónde están los archivos del hospital psiquiátrico?

La pasada semana en un contenedor cercano al colegio de las Escolapias se encontraban mapas, cuadros, libros... Alguien recuperó unos treinta mapas de hule muy antiguos. Toda una documentación para conocer la historia y la geografía del mundo. Ya los tengo en mi archivo. Cuando hay una mudanza o una herencia, suben al piso donde están los trastos y sin pensarlo y ver lo que se encuentran en las cajas, al ver papeles los depositan en los contenedores. ¡Cuánta historia se ha desperdiciado! ¿Dónde están todos los documentos de Antonio Crespo que tenía en su casa en la calle San salvador? Tantos había que se hundió el piso. Nada se sabe de ellos y estuve allí para que no tiraran nada. Lo tiraron en no sé qué lugar. Y esto es lo que conocemos, porque me han comentado que en determinadas casas todo lo que había en los 'doblados' ha desaparecido y ya jamás se encontrará. ¡Qué pena!