Pilar Vargas y Manuel Gámez afirmaron ayer que fueron a declarar al Juzgado de Instrucción número 2 de forma voluntaria, ante las noticias aparecidas en los medios de comunicación, ya que, aseguraron, no les había llegado ninguna citación judicial. El que sí tenía citación, era el concejal del PP, Francisco Robustillo, aunque le llegó de una manera inusual, ya que fue al juzgado a hacer un gestión y allí aprovecharon para entregársela en mano.

Una vez tomada declaración al imputado y a los testigos de este caso, la magistrada María Victoria Dávila deberá emitir un auto judicial con la decisión tomada tras escuchar a todas las partes y debe decidir si abre diligencias para la celebración de un juicio. También ha de determinar si Prudencio González sigue en calidad de imputado, o no, o lleva esta medida a alguno de los cuatro testigos que han declarado en este asunto denunciado por el ayuntamiento.