Rafael Pacheco, además de alcalde de Casar de Cáceres, donde se celebra desde hoy la Fiesta de la Tenca, es presidente de la Mancomunidad de Municipios Tajo-Salor, una comarca con una extensión 2.000 kilómetros caracterizada por su diversidad y heterogeneidad. Tras 26 años de andadura como entidad supramunicipal aún quedan pendientes muchos retos, como la lucha contra la despoblación, la creación de empleo o la igualdad de oportunidades con respecto a los habitantes de la ciudad. Desde su responsabilidad política Rafael Pacheco trabaja duro para superarlos.

-¿Por qué se celebra la XXX Fiesta de la Tenca este año en Casar de Cáceres?

-La celebración es rotatoria entre todos los municipios de la Mancomunidad de Tajo Salor y ya tocaba de nuevo que Casar se hiciera cargo de la misma, después de haber pasado ya por todos ellos.

-¿Por qué se ha ampliado a tres días la fiesta?

-Aprovechamos el ‘tirón’ de la celebración del treinta aniversario de la Fiesta de la Tenca para darle una vuelta a su diseño. Hasta ahora, concentrar todos los actos en un mismo día se hacía muy pesado para los propios ayuntamientos. Queríamos que, con independencia de que se haga la fiesta en todos los pueblos de la comarca, hubiera actividades en varios municipios. De ahí que, por ejemplo, la Ruta de la BTT de este año pase por tres de ellos que se sienten así copartícipes del acontecimiento.

-¿Qué significa para la Mancomunidad de Municipios Tajo-Salor el Día de la Tenca?

-Esta fiesta, además de poner en valor este pez de la comarca, presente en las charcas de prácticamente todos nuestros municipios desde el siglo XVI, se ha convertido, de hecho, en el Día de la Mancomunidad de Tajo-Salor, ya con una gran raigambre popular, así como reconocimiento de nuestra identidad. Es cierto que la comarca ha nacido en estos últimos treinta años, y que tiene unas costumbres propias y tradición e historia común. Necesitábamos una jornada como ésta para confirmarnos bajo una identidad propia.

-¿Qué le queda por hacer a la Mancomunidad de Municipios Tajo-Salor tras 26 años de andadura?

-Queda todavía mucho trabajo. Sobre todo nos jugamos el futuro de nuestros vecinos en toda la comarca, tanto de los municipios pequeños como de los grandes. Vivimos en la actualidad un preocupante proceso de despoblación que afecta a todos nuestros entornos rurales. Este proceso tenemos que intentar revertirlo urgentemente para que nuestros vecinos tengan empleo y posibilidades de vivir con todos los servicios necesarios. Por ello, es muy importante que aprendamos a conjugar nuestras particularidades con la cercanía a la ciudad de Cáceres y aportemos un entorno rural. A su vez necesitamos que Cáceres haga lo mismo con su núcleo urbano para que los habitantes de la comarca puedan gozar de una vida digna y de las mismas ventajas de cualquier ciudad.