Cáceres está a las puertas de su primer examen para optar a la Capitalidad Cultural Europea del 2016: hoy, una delegación encabezada por el presidente de la Junta y por la alcaldesa, presenta su proyecto ante los 13 expertos del jurado. Es la primera prueba decisiva que tiene que pasar la ciudad: si no la supera ya no habrá una segunda.

A pesar de que el proyecto ha tenido luces y sombras, hay suficientes argumentos para que los extremeños confíen en las posibilidades de Cáceres para avanzar en la carrera: su inmenso patrimonio monumental, un factor que fue determinante para elegir a Santiago en el 2000 y a Salamanca en el 2002; su proyecto enfocado tanto al corazón de Europa como a Iberoamérica, de modo que ninguna de las 15 ciudades restantes pueden presentar un sesgo tan europeo, nucleado en torno a la Academia de Yuste, y a la vez tan trascendente de lo europeo; el compromiso político y social en torno a la candidatura desde sus principios --la idea partió de un alcalde del PP, José María Saponi, y de un presidente de la Junta del PSOE, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, y ha sido acogida por toda Extremadura sin excepción--; y también el compromiso de la propia ciudad con el título de Capital Cultural, a la que optó desde primera hora --en mayo del 2003, y cuando solo Córdoba era candidata--, sin participar en la ´fiebre´ de la Capitalidad que se ha desatado posteriormente y que ha devenido en esta abundancia de postulantes. EL PERIODICO EXTREMADURA, que desde hace 4 años lleva en cada ejemplar el logotipo de Cáceres 2016 para poner de manifiesto su compromiso con el proyecto, sigue confiando en él. Cáceres puede.