MOCIÓN DE CENSURA

Pablo Iglesias se ha precitado

Sergio de Fuente // Estudiante

Muchos amigos y familiares socialistas me han llamado ignorante e hipócrita cuando les he dicho que me he dirigido al nuevo secretario general del Partido Socialista Obrero Español, Pedro Sánchez, a través de una carta.

La razón de estas afrentas se debe a que le he pedido, como socialista, pero sobre todo como persona progresista, que tienda la mano a partidos de izquierda como el de Pablo Iglesias, Podemos.

Es inaudito ver cómo socialistas y defensores de la izquierda manifiestan su temor a que el PSOE se alíe con partidos de izquierda separatistas, como ERC (Esquerra Republicana de Catalunya), o de extrema izquierda, como el Partido Comunista de España o Unidos Podemos.

Este último es el que más estupor crea entre los ciudadanos, que argumentan que no quieren que un chavista tome las riendas de la izquierda y convierta a España en Venezuela o en Cuba.

Estas personas aún no se han dado cuenta de que para echar al Partido Popular del Gobierno, desparasitar las instituciones y acabar con la corruptela política es preciso crear una izquierda fuerte, y la única manera de conseguirlo es con la unión de todos estos partidos.

En cuanto a la moción de censura, considero que Mariano Rajoy tenía razón al comparar la situación de España con la de un barco sin capitán que puede estrellarse en el caso de que Unidos Podemos consiga desbancarle del Gobierno.

A mi juicio, el señor Iglesias debería haberse abstenido durante un tiempo hasta encontrar apoyos suficientes para mediar en esta moción de censura pues, para su desgracia y la de su partido, nadie le apoyó en su último intento de reprobación.

Debemos tener nuestros propios criterios y no dejarnos engañar por las falsas habladurías populares. Todos queremos un cambio para nuestro país, pero primero debemos cambiar nosotros.