TAtl tiempo que se desvanece el curso escolar y que los niños, aliviados de las dichosas clases, invaden las calles, brota un clima de nerviosismo entre el profesorado. Casi seis mil aspirantes a funcionarios docentes han firmado las oposiciones de maestros que se celebran en Extremadura este año para 612 plazas.

Algunos opositores llevan años en la enseñanza y deben compatibilizar su trabajo con el estudio de las oposiciones, a pesar de tener destino a muchos kilómetros de casa y una familia a la que atender. Otros, normalmente los más jóvenes, tienen todo el tiempo para estudiar, pero se lamentan de no estar trabajando y conseguir, además de un sueldo y con él una cierta independencia económica, una experiencia docente que le permita dominar la exposición de la unidad didáctica (una clase) y unos puntos que pueden ser vitales para lograr la ansiada plaza. Para los primeros, los segundos llevan ventaja, pues tienen más tiempo para estudiar; para los segundos, los primeros lo tienen mejor, pues disponen de más méritos.

Quienes hemos pasado por este trance sabemos lo mal que se pasa y la injusticia que año tras año se comete dejando a gente fuera que no sólo ha trabajado muy duro dedicando muchas horas al día todos los días del año, sino que están preparados para ser buenos docentes. Sin duda, esa injusticia en absoluto es achacable a los tribunales, a la Administración o a los sindicatos. La culpa es del sistema, y tiene difícil solución.

Este año se estrena un procedimiento extraordinario en las CCAA, por lo que quienes hemos tenido algo que ver en la consecución de este proceso transitorio, estamos expectantes esperando que satisfaga a todos y logre los objetivos pretendidos.

En Extremadura el proceso selectivo de este año consta de una fase de oposición (60%), que no tiene carácter eliminatorio como otros años y una fase de concurso (40%). Tanto la Consejería de Educación como los sindicatos de la mesa sectorial, nos hemos esforzado al máximo para que este nuevo procedimiento salga bien y no haya un solo opositor que se sienta injustamente tratado. No se han escatimado medios materiales ni humanos: se van a movilizar alrededor de 500 maestros funcionarios, habrá unos 60 opositores por tribunal, se han celebrado numerosas reuniones con los presidentes de los tribunales y las comisiones de valoración de los informes con el fin de coordinar sus actuaciones tratando en todo momento de ser ecuánimes.

El pasado 22 de junio, a las 17 horas, comenzó la cuenta atrás de esta carrera sin tregua, a mediados de julio acabará el proceso y el día que se publiquen las notas será un gran día para seiscientas doce personas en Extremadura. Suerte a todos, felicidades a los nuevos compañeros y ánimo al resto, pues tendréis nuevas oportunidades para ser los seleccionados.

*Profesor y presidente autonómicode CSI-CSIF Enseñanza