WCw áceres acogerá este año la celebración del acto central del Día de Extremadura con el objetivo de impulsar su candidatura a la Capitalidad Cultural Europea que pretende para el año 2016. Por encima de apreciaciones políticas, la decisión parece un acierto en un momento en el que varias ciudades españolas (Córdoba, Málaga, Tarragona, Tenerife, Segovia y Zaragoza) se disputan esta posibilidad.

Después de que administraciones e instituciones extremeñas llegaran a un acuerdo para unir esfuerzos en esta aventura, tiene sentido esta propuesta nacida desde la excepcionalidad. La itinerancia, en esta edición, del acto de entrega de las Medallas de Extremadura no es más que un paso más en ese apoyo a Cáceres. Entre otros motivos, porque es necesario concebir esta iniciativa de la capitalidad para ser capaces de construir un proyecto colectivo, más allá de lo que pueda suponer la celebración del propio evento y de las infraestructuras culturales.

Cuestión aparte serán las formas que quiera exigir el alcalde de Mérida, Pedro Acedo, respecto de la intencionalidad política del Gobierno extremeño. Mérida es la capital autonómica y sede de este acto desde que se institucionalizó en 1993. Pero el edil no debe olvidar que antes también Guadalupe y Trujillo fueron protagonistas de los actos organizados en torno a la festividad del 8 de septiembre. Tal vez sea el momento de pensar en conjunto, como extremeños, por encima de localismos.