XCxelebramos la habitualidad con la que nuestros representantes autonómicos mantienen de manera formal o informal relaciones con Portugal y sus representantes. Estimamos que ésta es una orientación política e institucional muy adecuada, no sólo por nuestra orientación lusista estatutaria, sino porque nuestro amplio volumen de relaciones actuales y potenciales así lo recomiendan. Esperamos que se convierta en costumbre.
En la reunión que celebrarán el lunes Rodríguez Ibarra , el presidente de Portugal Jorge Sampaio y el primer ministro José Sócrates , se tratarán cuestiones cruciales y candentes para nuestro desarrollo socioeconómico y para el incremento de relaciones entre Extremadura y Portugal.
En primer lugar, el diseño de un AVE mixto, sea en 2010, como todos deseamos, o llegue en 2015 o 2020, (que ya sería tardar mucho), junto con la exigencia de 2 horas 45 minutos de recorrido Madrid-Lisboa, compromete el número máximo de paradas, con respecto a los presupuestos iniciales; y, por tanto, podría retirar, en promedio, amplia rentabilidad extremeña al AVE Madrid-Lisboa. Las soluciones, en principio, para no disminuir el número de paradas sólo son dos: a) Volver a un AVE de pasajeros; b) Aumentar a 3 horas el tiempo entre Madrid y Lisboa. O sea, o cede Madrid, o cede Lisboa en beneficio de Extremadura. Otras cuestiones como la línea de mercancías Madrid-Badajoz-Sines no son menos importantes en términos de transporte, entre otras cosas porque fue aprobada en Figueira da Foz y ratificada en Santiago de Compostela. Y, por supuesto, la siempre interesante y necesaria hilatura fina de comunicabilidad y accesibilidad del territorio en las inmediaciones de toda nuestra frontera.
En segundo lugar, la apuesta por la tecnología y la sociedad del conocimiento, constituye un desafío de los dos estados ibéricos para cubrir la brecha tecnológica e innovadora que les separa del resto de los países más desarrollados de la Unión Europea, pero también debe convertirse en un factor de oportunidad para Extremadura, sabiendo desarrollar una política hispanolusa o iberista conjugada con nuestro vecino país. Estimamos que son múltiples y diversos los campos y las acciones que se pueden y deben llevar a efecto en este sentido. Entre otros: a) Un intercambio fértil en el liderazgo ya consolidado de producción y difusión de software libre; b) Un ambicioso proyecto de aprovechamiento no escasamente comercial, sino industrial, tecnológico y científico conjunto, a partir de la parada del AVE en la frontera de Caya, innovando jurídica y urbanísticamente; c) La promoción y el trabajo conjunto en áreas estratégicas como las del corcho, la agroalimentaria, pero también y sobre todo en la promisoria energía solar fotovoltaica, que será la energía del futuro; d) Un apoyo decidido a las industrias de las lenguas ibéricas y a la difusión, aprendizaje y empleo del portugués en los medios de comunicación y en la sociedad extremeña desde la más tierna infancia, aprovechando una política de promoción trilingüista de la Unión Europea; e) Una conjugación más transparente y homologada, en el espacio educativo y de investigación europea entre las universidades rayanas.
Por último, potencialmente, entre todas las áreas de cooperación transfronteriza y transregional, no queremos olvidar una necesaria y mayor promoción aún para la apertura recíproca externa, sobre todo, al nivel de las pymes; el crecimiento de las facilidades para el establecimiento de redes de cooperación sectorial empresarial o incluso, la instalación en nuestro territorio, como puerta privilegiada del resto de España. Aunque, que duda cabe, el planteamiento y desarrollo de oferta turística conjunta, los consorcios para la prestación sanitaria o la simple coordinación y prevención para la extinción de fuegos resultan más que significativas.
Esperamos que estas reuniones no sólo den sus frutos deseados por ambas partes, sino que se sigan manteniendo tan periódicamente como aconseja nuestra estratégica posición geográfica, céntrica entre Madrid y Lisboa.
*Profesor de la Uex
