TDtemasiadas crisis superpuestas para no disponer de un instrumento sólido para afrontarlas. El mundo cambia deprisa, formulando retos desconocidos. De los Estados Unidos que puede pilotar Obama a la Rusia provocadora de Putin . De la eclosión de China a las avalanchas migratorias. De la tragedia del cambio climático a la consideración de que el crecimiento económico tiene límites que se acercan. El Estado es la principal palanca para tener protagonismo en estas crisis y en estos cambios. En España seguimos inmersos en una crisis de identidad en la que después de 30 años de democracia ni siquiera están nítidamente dibujados los límites de las autonomías y los del Estado. No hay consenso básico sobre dónde empieza España y dónde se acaban las autonomías, y el desgaste identitario promueve un abstencionismo global: faltar a clase de esta mundialización será perder sitio en el planeta. Empieza el curso con clímax preocupantes: los retos de Ibarretxe , el desafío de la Generalitat, la revuelta de los barones socialistas por la financiación autonómica, el ruido del frustrado anticipo de las elecciones gallegas y las convulsiones internas en el entramado de ETA. Y, envolviéndolo todo, una crisis o unas crisis de las que no se tiene diagnóstico preciso y cuyos horizontes se dibujan desde el voluntarismo de los deseos. Tiempos difíciles que exigen estadistas más que políticos preocupados por encuestas y elecciones. Pasar del cainismo de la anterior legislatura al trazo sutil de grandes decisiones estratégicas sería un milagro, pero la gravedad de los problemas exige curas prodigiosas ya que, cuando nos demos cuenta, los nuevos horizontes estarán dibujados y el que no tenga el lápiz afilado se quedará sin poder influir en un futuro que aún desconocemos. La iniciativa la tiene el Gobierno porque su responsabilidad desde el ejercicio del poder es superior a la de cualquiera. Hay que repensar España con urgencia y con una resultante definitiva. Quienes se sienten nacionalistas deben elegir el tamaño del Estado desde el que quieren influir en el mundo y cancelar sus dilemas para siempre.
