XAx los colectivos vecinales nos parece de una osadía inusitada pedir antes de dar. Muchos locales públicos de nuestra comunidad autónoma no cumplen con los requisitos que se les exigen; algunos no tienen las debidas autorizaciones, y se conducen sin respeto a las normas establecidas y sin escrúpulos por las molestias que causan a sus conciudadanos.

A todos ellos les preguntaría: ¿Han legalizado su situación? ¿Han insonorizado correctamente sus locales para dejar de molestar a sus vecinos, con los que conviven, con sus ruidos insoportables que minan la salud de quienes los perciben? ¿Han instalado dobles puertas y las mantienen cerradas para que no salga el ruido al exterior, procurando no molestar? ¿Respetan el horario de cierre? ¿Tienen la licencia adaptada a la actividad que explotan? ¿Tienen el proyecto firmado y visado por el colegio oficial correspondiente? Sanitariamente, ¿en qué condiciones tienen sus locales? ¿Tienen medidas de seguridad contra incendios?

Pues si no cumplen todo lo que la ley les exigen deberían estar mudos, no tener voz. No se les debería escuchar.

Para los que sí tienen todos los papeles en regla, un consejo: visiten a sus vecinos inmediatos, a los que tengan más cerca de su bar, pub o discoteca, y pídanles sus firmas para que les ayuden. Seguro que si no molestan les ayudarán en todos los aspectos. ¿Pero ustedes se atreverían a pedir esto?, ¿o es que son muy tímidos?

Lo más triste de todo, es que las autoridades, hasta la fecha, han sido incapaces de hacer cumplir las normas más básicas. Por ello, los hosteleros se crecen y aún quieren más, cuando ya gozan de todo el privilegio de los ayuntamientos. Estos dan síntomas de dejadez, pasividad, permisividad y falta de voluntad política.

El ruido, en zonas de concentración de locales de ocio, es incompatible con el uso residencial de las viviendas. Arruina la convivencia, deteriora nuestras calles y barrios, y debe combatirse con medidas tajantes y efectivas desde las administraciones.

Sería una barbaridad autorizar que se cierre más tarde.

*Portavoz de la Asociación en Defensa de los Afectados por el Ruido en Extremadura